Hoy se cumple un nuevo aniversario de la muerte del maestro provocada por un disparo de gas lacrimógeno durante la represión de una protesta sobre la ruta 22, en Arroyito. Del asesinato se deslindó la autoría material, que recayó en el cabo José Darío Poblete. Fue condenado a prisión perpetua en el 2008. Las responsabilidades en torno al operativo represivo, en cambio, se investigaron en la causa “Fuentealba II” y terminaron con el sobreseimiento de los 15 imputados sin alcanzar al entonces gobernador Jorge Sobisch.